SI SERÁ la soledad un timbre de prestigio, que una de las maneras más rápidas y mejores de socializar, según mi experiencia, es la de presumir de ella:

—Es que ¿sabes? No me gusta la gente.
—A mí tampoco, la gente es un asco.
—Se está mejor uno solo, di que sí.
—Yo me quedo por las tardes sola con mi gata, con una manta y viendo una película, y estoy como Dios. 
—Cómo te entiendo.
—Ruido y cotilleo, la calle es eso.
—Ya.